Una de las etapas más complicadas en la vida de toda persona es la adolescencia. Por ello, es también en la que somos más vulnerables a muchas cosas que no son muy sanas para nuestro organismo que digamos, entre ellas, las drogas.
Pero, ¿es posible prevenir las adicciones en los jóvenes? Desde luego que sí, y aquí te compartimos 10 formas de hacerlo:
1.- Con padres que pongan el ejemplo. Por diversos factores, como el ser con quienes más se convive, tener un lazo sanguíneo y representar una figura de autoridad, entre varias más, los padres siempre serán el primer ejemplo a seguir por los hijos.
2.- Aprendiendo a escuchar. Una buena comunicación entre padre e hijo es fundamental en todo sentido. Escuchar con atención los logros, las dudas, los problemas y todo lo que el joven quiera compartir, sin juzgar, hará que todo sea mucho más fácil.
3.- Conversando sobre el tema. Bien dicen que “hablando se entiende la gente”. Quizás te resulte un tema un tanto “incómodo”, pero es mejor que seas tú como padre quien le hable sobre los daños a la salud, a la economía, legales, etc., que consumir drogas le traerán.
4.- Conociendo las amistades de los hijos. No hay que ser “invasivos” en la vida privada de los hijos. Motivar a tu hijo a que invite a sus amigos a la casa (a comer, ver una película o un encuentro deportivo en la televisión, etc.), ayudará a saber si los amigos podrían causar algún problema en la salud del adolescente.
5.- Impulsando actividades saludables. Hacer ejercicio, practicar algún deporte o una actividad artística, son sólo algunas de las varias actividades que no sólo mantendrán sano a tu hijo, sino también alejando de las drogas.
6.- Fortaleciendo su autoestima. Demostrarle tu cariño y elogiarlo cuando así lo merezca, así como poniendo límites con cariño y evitar herirlo, son acciones fundamentales que le ayudarán a contar con un autoestima sólido, una herramienta que le hará ver lo innecesario que es consumir drogas para “caerle bien” a los demás o “encajar” en un grupo social.
Desde luego estas no son reglas “universales” ni nada que se le parezcan para evitar las adicciones en los jóvenes, pero en definitiva son herramientas bastante útiles y efectivas para alejarlos de ellas, al mismo tiempo que ayudas a fortalecer la relación padre-hijo y lo encaminas hacia una mejor vida.